En nuestro último newsletter, te hablamos de un artículo muy interesante que encontramos en la web de Kellogg Insight, la revista de la escuela de negocios de la Universidad Northwestern. El artículo se titula “5 Mindsets That Drive Consumer Behavior” y explica cómo los consumidores se comportan de forma diferente según el tipo de mentalidad que tengan en cada momento.
Según los autores, existen cinco tipos de mentalidad que influyen en las decisiones de compra: la mentalidad de abundancia, la de escasez, la de social, la de individual y la de experimental.
Cada una de estas mentalidades tiene sus propias características, ventajas y desafíos para los negocios. Por ejemplo, la mentalidad de abundancia se caracteriza por una sensación de satisfacción y plenitud, lo que hace que los consumidores sean más propensos a comprar productos que les aporten valor añadido o experiencias memorables. Por el contrario, la mentalidad de escasez se basa en el miedo a perder algo o a quedarse atrás, lo que lleva a los consumidores a buscar ofertas, descuentos o productos exclusivos.
En este artículo, queremos profundizar más en las otras mentalidades y darte algunos consejos sobre cómo puedes aprovecharlas para mejorar tu estrategia de marketing. ¿Estás preparado? ¡Vamos allá!
La mentalidad social
La mentalidad social se refiere a la influencia que tienen los demás en nuestro comportamiento. Los consumidores con esta mentalidad buscan la aprobación, el reconocimiento o la pertenencia a un grupo. También se dejan guiar por las opiniones, las recomendaciones o las reseñas de otros usuarios.
Para atraer a los consumidores con mentalidad social, puedes usar estrategias como:
- Crear una comunidad alrededor de tu marca, producto o servicio. Puedes usar las redes sociales, los blogs, los foros o las plataformas de contenido para generar conversación, interacción y engagement con tu público.
- Mostrar testimonios, casos de éxito o historias de clientes satisfechos que hayan usado tu producto o servicio. Esto generará confianza y credibilidad en tu marca y motivará a otros a seguir sus pasos.
- Ofrecer incentivos, recompensas o beneficios por compartir tu contenido, recomendar tu producto o invitar a otros a unirse a tu comunidad. Esto fomentará el boca a boca y la viralidad de tu marca.
La mentalidad individual
La mentalidad individual se refiere al deseo de expresar nuestra identidad, personalidad o estilo. Los consumidores con esta mentalidad buscan productos o servicios que les permitan diferenciarse, destacar o ser únicos. También valoran la personalización, la exclusividad o la originalidad.
Para atraer a los consumidores con mentalidad individual, puedes usar estrategias como:
- Ofrecer opciones de personalización, customización o diseño de tu producto o servicio. Puedes permitir que los clientes elijan el color, el tamaño, el nombre, el mensaje o el logo que quieran para su producto o servicio.
- Crear productos o servicios limitados, especiales o únicos. Puedes lanzar ediciones especiales, colecciones cápsula, colaboraciones con influencers o marcas reconocidas o productos personalizados para ocasiones especiales.
- Mostrar cómo tu producto o servicio refleja los valores, las creencias o las aspiraciones de tu cliente. Puedes usar el storytelling, el branding o el marketing emocional para conectar con tu público y transmitir tu propósito, tu misión o tu visión.
La mentalidad experimental
La mentalidad experimental se refiere a la búsqueda de nuevas sensaciones, emociones o experiencias. Los consumidores con esta mentalidad buscan productos o servicios que les sorprendan, les diviertan o les hagan sentir algo diferente. También son curiosos, aventureros y dispuestos a probar cosas nuevas.
Para atraer a los consumidores con mentalidad experimental, puedes usar estrategias como:
- Crear experiencias inmersivas, interactivas o lúdicas alrededor de tu producto o servicio. Puedes usar la realidad virtual, la realidad aumentada, los juegos, los concursos o las sorpresas para generar engagement, diversión y recuerdo en tu público.
- Ofrecer muestras, pruebas o degustaciones de tu producto o servicio. Puedes permitir que los clientes prueben tu producto o servicio antes de comprarlo, o que lo comparen con otros productos o servicios similares o diferentes.
- Innovar constantemente en tu producto o servicio. Puedes introducir mejoras, novedades o cambios en tu producto o servicio para adaptarte a las necesidades, los gustos o las tendencias de tu mercado.
Conclusión
Como has visto, los consumidores no son todos iguales, sino que tienen diferentes mentalidades que influyen en su comportamiento de compra. Conocer estas mentalidades y saber cómo aprovecharlas para mejorar tu estrategia de marketing puede ser la clave para diferenciarte de tu competencia, atraer a tu público objetivo y fidelizar a tus clientes.
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